Ligorio. San Alfonso  María de
          [955](1696-1789)

 
   
 

 
  

  

   Fundador de la Congregación del Stmo. Redentor (Redentoristas) en 1732. Fue gran moralista de la Iglesia Católica, quien le declaró Doctor por sus sabias enseñanzas y por sus profundas intuiciones sobre la distinción entre el bien y el mal, sobre el valor de la conciencia humana, sobre la primacía del amor en relación a la misma ley divina o humana. Su estilo moral estuvo adornado de dimensiones prácticas y de intuiciones evangélicas, inspiradas en su pasión por la verdad, en su respeto por el hombre y en su sentido de la libertad para hacer el bien, el principal regalo de Dios a sus criaturas inteligentes. 
    Se le puede llamar el Pedagogo de la moral cristiana, no sólo de su tiempo, sino de las épocas posteriores de la Iglesia.

    Jesús fue el centro de todas sus enseñanzas. Fue catequista por excelencia, con ideas sencillas, reflexiones directas, objetivos clarísimos y, sobre todo, amor sin medida a quienes acudían a escuchar su palabra. Y, como buen catequista, siempre sabía situarse en lo fundamental y en lo cautivador del mensaje de Jesús.
   Nació en 1696, el 22 de Septiembre, en Marianella, cerca de Nápoles. Recibió buena formación y a los 16 años ya defendió una tesis al terminar sus estudios de Derecho. En 1716 obtuvo el grado de Doctor. Se inició en la abogacía. Con sólo 20 años tenía ya reputación de hábil profesional. Un fracaso en un pleito entre el Duque de Orsini y el de Toscana le desengañó de la profesión y de la sociedad.
    Pensó en hacerse sacerdote. En 1723 comenzó sus estudios de Teología. en 1724 recibió el Sacerdocio. Se dedicó a atender e instruir a niños y jóvenes abandonados. Inició las "Capillas del atardecer", para reunir a los jovencitos.
    En 1729 dejo su casa paterna para contar con más libertad de acción y fue a vivir al Colegio Chino, fundado por el P. Ripa. Se dedicó a la predicación en la capilla del Colegio. Desde él, comienza a realizar misiones rurales, que le dieron reputación de hábil predicador y director espiritual. Durante unos años su vida estuvo en la predicación y la catequesis. Se le juntaron otros sacerdotes y con ellos fundó el 9 de Octubre de 1732 la Con­gregación del Stmo. Redentor.
   También se dedicó a escribir. En 1748 publicó su obra más original y significativa: "Teología Moral", libro que define su sistema moral propio y flexible.
   Luego, en medio de sus correrías apostólicas, fue publi­cando otras obras que se hicieron populares: "Las glorias de Ma­ría", las "Consti­tuciones de la Orden del Stmo. Redentor".
   En 1762 fue propuesto por Carlos III, a la sazón rey de Nápoles, para el Obispa­do de Sta. Agueda de los Godos, Dióce­sis cercana a Benevento. Recibió la consagración episcopal el 20 de Junio de 1762, con gran oposición de los jansenistas y liberales, que veían en él un enemi­go de sus tesis, rigoristas los unos y naturalistas los otros.
  Su vida siguió humilde, apostólica y sencilla. Varias veces renunció al Obis­pado, pero Clemente XIII y Clemente XIV no aceptaron su renuncia. Estuvo dotado de dones místicos, que le hacían más influyente en determinados ambientes de la Iglesia.
  En 1775 logró que aceptaran la renuncia a la Diócesis y se dedicó al gobierno de la Congregación, que iba creciendo en medio de disensiones internas y ataques externos.
 

 

 

   

 

 

 

 

Su obras escritas fueron 111, quedando en el recuerdo las más catequísticas como: "El gran medio de la oración", "La práctica del amor a Jesucristo", "El hombre apostólico", "Instrucción catequística sobre los mandamientos y sacramentos", "Camino de la salvación", "Manera de conversar familiarmente con Dios", "Pequeño tratado de la oración", "Reglamento de la vida cristiana", "Compendio de la doctrina cristiana", "Selva de materias instructivas y predicables", "Instrucción para la oración mental de los niños durante la Sta. Misa", "Victorias de los mártires" y "Avisos a los predicadores."
   Falleció el 1 de Agosto de 1787, a los 91 años y fue enterrado la iglesia de San Miguel, en la ciudad de Nocera degli Pagani, donde había muerto. Fue Beatificado por Pío VII el 15 de Setiembre de 1816 y Canonizado por Gregorio XVI el 26 de Mayo de 1839. Pío IX le declaró Doctor de la Iglesia el 23 de Marzo de 1871.